Timo Wong ha querido marcar la diferencia en el mundo de los teléfonos celulares, y para eso no ha apelado a la última tecnología, la pantalla más grande del mercado, las prestaciones ultra novedosas del Bluetooth, vídeo, etc.
Pero aquí no hablamos de un teléfono táctil sino de uno cuyos botones están compuestos por una superficie irregular, fabricada con un material muy suave, y barreras invisibles entre número y número.
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